Bueno, realmente es el paso del presente (y en breve el del pasado), el que deberían estar dando todas las empresas y el que deberíamos aconsejar todas las consultoras…
En los últimos dos años el uso de las redes sociales por parte de los usuarios y las empresas ha sido brutal y se prevé la consolidación definitiva en el próximo 2012. Pero esta consolidación ha de darse sobre unas bases sólidas y firmes.
Las redes sociales no solo favorecen la gestión y creación del contenido por parte de los usuarios, también permite a las marcas un conocimiento exhaustivo de sus consumidores. Como comenta Antonio Gallo en el post “Segmentación de mercado y su influencia en las redes” los procesos de CRM fomentan la segmentación, el conocimiento del consumidor y su posterior agrupación en función de su comportamiento. Y todo esto, gracias a la evolución de la tecnología, es posible conocerlo en el momento, con lo que las marcas deberían ser capaces de mandar mensajes, promociones, etc., personalizados, y en muchos casos únicos, a sus usuarios.
Como adelantaba Marketing Directo, el CRM actual tiene la obligación de integrar a las redes sociales dentro de sus actividades, pues es ahí donde están los consumidores, donde pasan mayor tiempo y donde hablan.
Un buen CRM Social implica un estudio detallado, pormenorizado y permanente de la morfología de la comunidad de cada marca y producto, cómo reaccionan los usuarios ante determinados mensajes/promociones, etc. Este análisis “a mano” sería prácticamente imposible de llevar a cabo, gracias a Dios cada vez hay más herramientas que nos pueden ayudar en esta labor; Carlos Molina realizó un análisis de las mismas en su blog: “Las 20 mejores herramientas de Social CRM”.
Ahora toca ponerse las pilas para no llegar tarde…