Con este slogan el gobierno egipcio atraía a miles de millones de personas para visitar uno de los países más atractivos, turística y culturalmente hablando. Hoy Egipto está en boca de todos, pero no por sus pirámides. Egipto se ha convertido estos días en la búsqueda más solicitada en Google, con más de 27 millones y medio de entradas.
El mundo 2.0 no ha sido menos, y parece ser que no sólo ha adoptado el slogan “Where it all begins”, sino que ha ido a más, y viendo los TT de Twitter podríamos decir que Egipto se ha convertido en el lugar “From it all begins”.
Fuente: Trecebits.com
Los usuarios más activos toman la palabra en esta contienda, de la que nadie y todos somos partícipes, y se crean gigabytes de mensajes, post, tuits, actualizaciones de estado, fotos, videos, hastags sobre Egipto y su situación. Los usuarios más pasotas toman parte también y, de la noche a la mañana, se convierten en influencers.
La globalización informativa es cosa del pasado. Los medios de comunicación tradicionales se han visto superados por los medios digitales, que reducen el tiempo de comunicación de los mensajes informativos, llevándolos prácticamente a la inmediatez.
Facebook ha duplicado el número de usuarios en Egipto en las dos últimas semanas, convirtiendo a miles de personas en informadores de primera mano de los últimos y más candentes hechos que se acontecen en aquel país. Los ciudadanos se convierten en periodistas. Y las redes sociales son su medio de comunicación internacional e instantáneo.
Pero los SM no sólo son útiles extramuros. Muchas de las revueltas que se organizan entre los ciudadanos egipcios fueron creadas, implementadas y convocadas a través de estas plataformas. Es por eso que el pasado miércoles el gobierno de Mubarak decidió bloquear las conexiones a Internet egipcias con el fin de intentar acallar a la muchedumbre que clama por su dimisión. Una decisión del todo infructuosa que ha obligado a recular al gobierno, restableciendo al completo las conexiones a la Red.
Nadie sabe cómo acabará la situación actual de Egipto, a qué solución o derrotero se llegará en los próximos días. De lo que sí podemos estar seguros es de que, gracias a las redes sociales, seremos los primeros (y los últimos al mismo tiempo) en enterarnos del más o menos buen desenlace de esta crisis.